Introducción
El
presente ensayo trata sobre el desarrollo motor de la niñez, dicho desarrollo
es muy importante porque contribuye a ampliar sus capacidades, durante los
primeros años de vida el desarrollo motor y mental del niño van íntimamente relacionados,
a partir de su interacción con el medio que le rodea a través de sus
movimientos y la manipulación de objetos el niño forma sus conocimientos.
El
progresivo descubrimiento de su cuerpo como fuente de sensaciones, la
exploración de las posibilidades de acción y funciones corporales, constituirán
experiencias necesarias sobre las que se irá construyendo el pensamiento
infantil. Asimismo, las relaciones afectivas establecidas en situaciones de
actividad motriz, y en particular mediante el juego, serán fundamentales para
el crecimiento emocional.
Ensayo sobre el desarrollo motor:
El
desarrollo motor es un proceso donde los
seres humanos adquieren de manera voluntaria los movimientos de su cuerpo,
dichos movimientos se conocen como motricidad, está a su vez se divide en
motricidad fina y motricidad gruesa. La motricidad fina son las habilidades
para mover las manos y dedos, la motricidad gruesa es la destreza de realizar
movimientos con todo el cuerpo.
Podemos
fortalecer la motricidad gruesa a través de los masajes y actividades
motivadoras de acuerdo a la edad del niño/a, cuando un infante muestra
dificultad en la motricidad se le hace un referimiento a su pediatra, en
algunas ocasiones su doctor lo refiere a rehabilitación si lo requiere, en ocasiones
encuentran alguna debilidad motriz, donde recibe terapia para reforzar su
motricidad gruesa.
Los
niños/as reciben estimulación a temprana edad para que tengan un buen
desarrollo y no presenten dificultad a
medida que vaya avanzando en el contexto escolar.
Es
muy importante que los niños/as gocen de una motricidad fina bien definida, hay
que trabajarle a temprana edad con actividades motivadoras para lograr que
ellos tengan un buen desarrollo en la motora fina.
A
temprana edad se le trabaja la motricidad a los niños/as para que tengan un
buen desarrollo intelectual y no manifiestan ningún tipo de dificultad en el
contexto escolar y personal.
Para
que tengamos éxito con nuestros pequeños debemos involucrar la familia educarla
y concientizarla para que tengan un conocimiento positivo de cómo deben ayudar
a sus hijos a tener un buen desarrollo motor.
Los
maestros del Nivel Inicial somos los responsables de construir una buena
base tanto en el desarrollo motor de los
niños/as como en las demás áreas y dimensiones del desarrollo de la primera
infancia, para lograrlo nos apoyamos en los masajes y otras actividades de estimulación temprana.
Los
recién nacidos pueden mover su cuello haciendo girar la cabeza de un lado al
otro. A partir de los tres meses los niños pueden arrastrarse con su cuerpo de
forma voluntaria.
En
el primer año de vida los niños/as adquieren mayor desarrollo en sus
movimientos lo que le permite explorar su entorno ampliamente y relacionarse
con los demás, (principalmente los niños que son llevados a centros como las
Estancias Infantiles), donde se evidencia los esfuerzos de las maestras del
Nivel Inicial, con el paso del tiempo los movimientos de los niños se vuelven
hábiles y la motricidad mas perfeccionada.
Algunos
niños cuando no se le trabaja la motricidad tienden a tener problemas al
avanzar de grado, por ende las maestras de Nivel Inicial debemos hacer énfasis
en lo que es la motora fina para que no
muestren dificultad en la lecto escritura ni en otras áreas.
Aunque
todos los niños logran alcanzar un desarrollo motor, no todos realizan las
mismas cosas ni a la misma edad, no todos tienen la misma rapidez en sus
movimientos por eso es bueno estimular a los niños desde su nacimiento, sin
embargo si un niño no tiene dicha habilidad no es asunto de alarmarse, aunque
si es pertinente consultar con su pediatra
para recibir la información adecuada y en caso de tener alguna
dificultad poder iniciar una rehabilitación en el tiempo oportuno evitando
daños mayores.
En
ocasiones algunos niños sufren complicaciones durante el embarazo o el parto,
lo que provoca que el niño nazca con
riesgos de sufrir traumas cerebrales que afecten o retrasen su
desarrollo.
Algunas personas, tanto niños como adultos sufren accidentes o
enfermedades donde se ven atrofiados sus movimientos y mediante terapias logran
recuperarse, estas terapias se
identifican como terapia ocupacional y
terapia física; la primera se ocupa de rehabilitar las manos y la segunda el resto del cuerpo o
la motricidad gruesa.